Este martes se entregó a la justicia el menor de 13 años que el domingo baleó a un policía en Córdoba durante un operativo ocurrido en Carlós Paz.
Durante un procedimiento policial hubo un forcejeo, el adolescente tomó el arma reglamentaria de un policía y le disparó en el abdomen. Otros dos menores fueron demorados.
Este martes se entregó a la justicia el menor de 13 años que
el domingo baleó a un policía de la provincia de Córdoba durante un operativo
ocurrido en Villa Carlos Paz.
El agente Pablo Bustos recibió un disparo en el abdomen
durante un procedimiento montado para encontrar a los asaltantes de una mujer
que transitaba por la calle.
Por las descripciones de los presuntos autores, un grupo de
efectivos inició un operativo en calle Torricelli y cuando encontraron a las
personas señaladas, comenzó un enfrentamiento.
La fiscal Jorgelina Gómez detalló que durante la
intervención, uno de los jóvenes se dio a la fuga y trató de llevarse el arma
del policía, disparó y resultó lesionado también otro menor de edad.
En el forcejeo, uno de los menores (13) que conformaba el grupo
tomó el arma reglamentaria del policía y le disparó en el abdomen. El
adolescente estuvo prófugo pero se entregó este lunes. Por el hecho, otros dos
adolescentes, de 14 y 16 años, fueron demorados.
En tanto, el agente fue trasladado a la capital cordobesa y
está internado en la clínica Vélez Sarsfield, donde evoluciona favorablemente y
no tiene asistencia respiratoria.
Respecto al autor del disparo, se encuentra alojado en el
Complejo Esperanza.
En este contexto, surgieron dudas sobre si los efectivos
policiales incurrieron en maltratos hacia los menores de edad en momentos
previos a haberse desarrollado la violenta acción. Cabe destacar que el
compañero del efectivo baleado, el oficial Fuentes fue imputado por
"lesiones calificadas en el ejercicio de la función y por el (artículo) 41
bis del Código Penal", explicó la fiscal Gómez.
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