Reunión entre Sindicato de Empleados municipales y Jorge Andino, secretario general del gremio.
En la tarde del viernes, un centenar de personas se acercaron a la sede del Sindicato de Obreros y Empelados Municipales de General Pico, en Avenida San Martín. Ante la gran cantidad de afiliados, personal policial debió cortar las calles para evitar conflictos de tránsito que agudicen un clima que ya se sentía espeso.
La expectativa por la reunión con Jorge Andino, secretario general del gremio, iba en aumento con el correr de los minutos y algunas voces comenzaban a prever qué podría pasar.
Marcelo Martín, referente del grupo y unos diez trabajadores ingresaron a las instalaciones para mantener una reunión con las autoridades a fin de lograr un consenso que permita llevar calma a los manifestantes. Media hora más tarde, todos ellos salieron para dar las explicaciones del caso y dar a conocer qué avances hubo. Entre reclamos e insultos, Andino confirmó que se aceptará el reclamo del pase a planta permanente de 304 empleados para ser presentado ante el Poder Ejecutivo.
"Lo más importante que ha cambiado desde el día miércoles hasta hoy, es que ellos empezaron a escuchar a la gente, a los trabajadores. Obviamente que va a haber discrepancias porque todavía no hay nada solucionado, esto recién arranca para nosotros. Han entendido el pedido del pase a planta permanente de 304 trabajadores y de la necesidad de ver algunos puntos que afectan el ingreso de futuros empleados a la planta", sintetizó Martín.
Aseguró que el actual estatuto debe actualizarse, puesto que fue creado en el año 1985 y deben introducirse algunas cuestiones de actualidad, como la paridad de género. Sin embargo, desechó la posibilidad de contemplar el documento firmado en noviembre que generó un cimbronazo puertas adentro del municipio.
"El pase a planta tiene que ser ya para la totalidad de los trabajadores, porque en algunos casos llevan 4,5, 10 y más años que están contratados. Muchos de ellos antes fueron monotributistas y otros estuvieron por resolución", añadió.
La próxima semana se llevará a cabo una mesa de trabajo con
todos los gremios para analizar con profundidad los puntos en discusión. Aunque
no tenga una resolución positiva, se descartan medidas de fuerza: "No
queremos hablar de eso. La gente está pidiendo una respuesta con celeridad y
una medida de fuerza es algo que nos perjudicaría a todos. Sobre todo a la
comunidad, porque nosotros nos debemos a ellos", concluyó Martín.
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